jueves, 23 de octubre de 2014

Reflexiones de una estudiante de medicina

Hoy es el día del médico, no muchos lo saben, así como también no muchos saben lo que es estudiar medicina.

Soy una chica de 20 años estudiante de 5to semestre en la universidad de mi estado. Es bien conocido el hecho de que la medicina es una carrera de sacrificios y temores, que no todos viven para contarla. Unos le temen y a otros más no les interesa, sin embargo, siempre será bien respetada.

Siempre supe lo que quería ser. Tal vez por que mis padres son médicos y no vi nunca nada mas que eso.
Tal vez por que realmente esto es lo que estoy destinada a ser, aunque realmente no creo en el destino.
Tal vez por que no me veía haciendo otra cosa... las posibilidades son tan amplias como los tipos de células que hay en nuestro cuerpo, por incluir una referencia medica.

Llevo casi tres años en esta carrera y debo decir que siempre ha sido una relación amor/odio.

Amo saber más del cuerpo humano, adoro saber que cada uno de nosotros somo fascinantes por el simple hecho de tener vida.
Amo como el cuerpo se aferra a la vida (muchos de nosotros deberíamos aprender de él).
Amo el riñón, con todo y sus túbulos, cálices con orina incluida.
Amo el hígado, sus hepatocitos, su cápsula de glis, sus lóbulos, sus bordes, su ligamento falciforme y la temerosa sensación de percutir a un paciente con hepatomegalia.
Amo el sistema nervioso central, la medula espinal, todos los pares craneales y su origen real y aparente y esas maravillosas ganas de mi doctora de semiología de atorarnos con anatomía.
Amo el ciclo de la urea,  el signo de Murphy y la ley de Frank-Starling.

Pero Odio tener que desvelarme todas las noches.
Odio no tener los fines de semana libres.
Odio no vivir en mi casa.
Odio no poder leer otras cosas.
Odio no comer bien por las prisas.
Pero lo que mas odio, es que tuve que dejar de escribir para enfocarme a esta novia celosa que si no la atendió, me deja.... y no podría superarlo.

Pero así como odio tantas cosas, amo muchísimas más. Amo el saber que podre ayudar a mi Nii Nii cuando nos casemos y tenga alguna molestia. Amo que mis familias en comunidad se sientan más tranquilas cuando voy (aunque solo les tomo la presión).

Hace unos días.. ¡Fui yo quien atendió a mí tía! Bueno, solo le tome la presión y le ausculte los pulmones pero al menos la tranquilcé ("No tía no es la presión, esta normal. Tampoco tus Pulmones, solo es un dolor muscular) ¿Saben cuanto significo eso? Por primera vez no fueron mis padres, si no ¡YO!

¡Yo pude! Aun a pesar que suelo frustrarme seguido debido a que siento que con cada semestre que pasa, me vuelvo menos medico, que aun falta tanto por aprender y la carrera tan poco.... (Sí. solo 7 años, eso es poco)

Amo/odio mi carrera, pero al mismo tiempo se que esto es algo que quiero... algo que me hace feliz.

He dejado de hacer tantas cosas... que la lista solo aumenta conforme pasan los días.
Pero al mismo tiempo me enamoro más y más de esta novia celosa y posesiva que se llama "Medicina".









¡Feliz Día del Medico!



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